MI INSPIRACIÓN

Eres la principal protagonista de mis
intentos de versos, y aún si pudiera hacerlos perfectos, si no fueras tú la musa,
no sabría a poesía, al menos no a mí,
y me sobraría la tinta, el afán de escribir
encontraría sosiego cuando el límite
de la inspiración que despiertas parece
no tener techo ¿Y como tenerlo?
Si tus labios hacen música al hablar,
aferrarse a ellos es flotar por el cielo,
la malicia que forma el recorrido de tu
lengua al saborearlos, o el fresco que
estampas en mi memoria cuando los
presionas, es invitar a mis demonios
eróticos a su único y favorito infierno.

Eres el poemario más bello que he
leído en unos ojos ¿como pueden dejar
de deslumbrarse los míos si aunque me
desconecto de lo que me rodea, es cuando
tú lo estás llenando todo? He aprendido
a leer con las manos las líneas poéticas
escritas con la sal del tintero de tus poros.
Ya conozco de memoria los versos libidinosos
que se escurren en medio de tus piernas,
los he deletreado uno a uno con mi lengua,
pero cada que me arrodillo a leerte sigue
siendo como la primera vez, calcinas
todos mis rincones, exaltas mi espíritu
hasta provocar en mi sexo la más impetuosa
de las tormentas, hasta que los latidos ya
no los puedo contener en el pecho.

Tú espalda y tus piernas son arte y lienzo,
llevas en ellas un extracto del universo,
lo suficiente para seguir venerando con mi
asombro el mágico poder de lo supremo.
Donde llevas sobradas letras cargadas de
sensualidad, y que logran desnudar,
mis más cursis sentimientos;
llevas en ellas el pergamino donde puedo
imprimir mis anhelos más íntimos, los
sueños que, para la moralidad de muchos,
pueden resultar demasiado indebidos,
pero lo más importante, la poesía en tu piel
más que en versos se vive, se escribe,
se lee, se recita en verbos. En mis manos
llevo tus líneas, en mis labios el sabor de
tus besos, no se aparta el olor de tu cabello,
tu lado más eróticamente perverso
arde en cada centímetro de mi cuerpo
¿Cómo no ser la principal protagonista
de mi intento de hacer poesía?

Dicen que a mi edad las mujeres:
Ya no deberíamos usar jeans ajustados y rotos.

No debemos usar el cabello largo porque nos hace ver “todavía más viejas”.

No debemos maquillarnos como si fuéramos “jovencitas”
No debemos vestir de negro y en su lugar debemos ser más básicas para vernos “elegantes”
No debemos tomarnos “selfies” y mucho menos haces gestos para no vernos ridículas.

Dicen tantas cosas que las mujeres de mi edad debemos evitar y lo que se les olvida es que a mi edad nos vale madre cuando nos quieren decir que hacer.

A mi edad, no seguimos las reglas absurdas que nos quieren imponer.

A mi edad nos importa estar bien sólo con nosotras mismas, nos divertimos cómo, cuando y con quien queremos.

Hacemos el ridículo si eso nos saca una buena carcajada, vestimos para nosotras mismas y como lo amerita la ocasión y no porque nos importe su opinión.

A mi edad estamos libres de prejuicios y nos dedicamos a vivir sin temor a ser juzgadas.

SEXO Y MUERTE
.
Son esos momentos en que solo nos importa el sexo y el dinero. Pero dado que este último carece de fluidos físicos o espirituales, que puedan conectarnos con el amor, todo se nos reduce al universo del sexo. Por eso sentimos pánico a morir, y follamos como si fuera la última y postrera vez, aferrándonos en el orgasmo a la vida.

PERVERSA
.
Era mil veces más perversa que yo. Fue lo que consiguió enamorarme hasta volverme loco. Resultó tan maravilloso por lo siniestro de cada uno de los juegos que planteaba. Que ni siquiera pensé en que terminaría, porque en algún momento, necesitaría más.

SEX IT'S SEX
.
Nadie entendió mejor que ella el sexo, nunca se le pasó por la mente confundirlo con el amor. Probablemente por eso fue la mujer que más disfruté cuando me la follaba, o ella me cogía salvajemente. Seguramente fue por ello, que es la única mujer de la que me enamoré perdidamente.

BAJARSE LAS BRAGAS

Parecía tan fácil. Era tan sencillo.
Tan sólo bajar una prenda del cuerpo.
Hacerlo de una manera glamurosa y sexy.
Descubrir mi búsqueda de tal manera,
que pareciera el mayor de los tesoros.
Lo habíamos imaginado de tal forma,
de modo tan casual, casi cotidiano,
que convertir la primera vez, en una más,
pasó a ser algo en la vida extraordinario.
Podía aprovechar tus manos ocupadas,
y abalanzarme sobre ti como un jabato,
o quedarme pasmado ante ti mirando,
como si en cada palmo de la epidermis,
existiera el mapa que envolvía el sexo...
Me quedé ante lo extraordinario inerte,
sin saber como actuar a partir de el acto,
de algo tan simple y habitual, y de diario,
como bajar con las dos manos el tanga.
A partir de ahí el cuerpo desnudado,
alerta a la llegada del amor y del abrazo.

NO TE AMO, PERO TE MIENTO

El día que me dijiste que te mintiera, y te hiciera creer que te amaba aunque no fuera cierto y lo verbalizara. Lo hice sin darme cuenta que al decirlo, estaba pensando en otra persona, a la que verdaderamente amaba con locura. Llegué a convencerme que es posible que con el tiempo te quisiera. Nunca me enamoraría de tí . ¿Realmente era tan importante amar a alguien para que fuera tu pareja?

La respuesta me llegó fácilmente. Le dije a quien amaba que me follará, y lo hizo tan animal como él era follando. Mientras me corría, a la par que me nalgueaba el culo, tirando de mi pelo, y gritando improperios para que moviera las caderas con más fuerza, y me corrí como una perra, lo supe a ciencia cierta. Le podría decir que lo amaba,mintiendo. Pero no podría tenerlo encima en plan misionero, sin pensar en lo que acababa de ocurrir.

Y aquí me hallo sentada en el suelo. Creo que sí le digo una vez más que lo amo, vomitaré.

Se que uno como hombre, tiene ese impulso erótico que pareciera constante. Que nos cuesta evitar la mirada a la curvatura de una hermosa mujer. Pero cuando conoces a una mujer y alimentas ese mismo deseo, las cosas son rotundamente distintas

Una mujer ardiente posee una fuerza tan intensa que ni todas las ganas de cientos de hombres se le igualan. Cuando esa mujer se entrega al placer, es inagotable y hambrienta pero a la vez te arrastra a sus sensaciones al punto de casi vivirlas con su misma intensidad.

Alimentan su imaginación de tal forma que la más mínima caricia o un simple beso en su boca, provoca espasmos violentos y divinos llevándolas a un trance en el cual olvidas su naturaleza más calmada o maternal, haciéndolas dueñas completas de sus deseo y con ganas de probar perversiones incluso más osadas que los hombres.

No les falta mayor estímulo pues, si las has tratado como se merecen, son capaces de llevarte al cielo y al infierno a la vez deseando no querer despegarte de ellas por horas y ni aun así la dejaras completamente satisfecha pues hasta su anatomía esta hecha para aguantar decenas de orgasmos en cuestión de minutos y aun así sedientas de más.

Si ves ese espectáculo divino es la prueba fehaciente de que tienes su confianza y cariño completo pues ese deslumbrar de belleza erótica no se la entregan a cualquiera o no con la misma intensidad.

Si buscas solo placer búscate una puta y sáciate pues una mujer de verdad apasionada solo la consigues entrando en su corazón y sus sentimientos que no merecen ser engañados solo por tu placer pasajero.

Por eso nunca subestimes a una mujer ni juegues con sus sentimientos, pues podrías perderte la mejor parte de ella o incluso la manera de descubrir la mejor parte de ti mismo.