El Hijo Distante
Desde joven, el hijo siempre había tenido una relación complicada con su padre. Este hombre sabio, con años de experiencia y vivencias, constantemente ofrecía consejos y advertencias a su hijo, con la esperanza de guiarlo hacia una vida plena y exitosa.
Sin embargo, el hijo, lleno de juventud y rebeldía, desoía estas palabras, convencido de que su camino era el correcto.
"Estudia con esmero", "Elige bien a tus amigos", "Ahorra para el futuro", "Sé paciente y perseverante", eran solo algunos de los consejos que el padre repetía con frecuencia. Pero el hijo, con una mezcla de impaciencia y orgullo, prefería hacer las cosas a su manera.
Con el tiempo, los fracasos comenzaron a acumularse. Las oportunidades se desvanecían, las amistades se disolvían, y los errores financieros se multiplicaban. Cada caída era más dura que la anterior, y con cada golpe, el hijo empezaba a cuestionar sus decisiones.
Años después, tras enfrentar numerosos desafíos y dificultades, el hijo se encontró solo en un momento de reflexión. Recordó las palabras de su padre, las lecciones ignoradas y los consejos desestimados.
Comprendió que su padre no hablaba desde el control o la imposición, sino desde el amor y el deseo de protegerlo y prepararlo para la vida.
En un acto de humildad, el hijo decidió buscar a su padre. Sentados juntos, bajo la sombra de un árbol que habían plantado juntos años atrás, el hijo finalmente expresó lo que había guardado en su corazón por tanto tiempo.
"Padre, ahora entiendo lo que intentabas enseñarme. Lamento no haberte escuchado antes. Tus palabras, aunque no lo veía entonces, eran guías que podrían haberme ahorrado mucho dolor.
Gracias por no rendirte conmigo y por siempre estar dispuesto a compartir tu sabiduría."
El padre, con una sonrisa llena de amor y comprensión, respondió: "Hijo, nunca es tarde para aprender y crecer. La vida es una serie de lecciones, y estoy orgulloso de que hayas encontrado tu camino. Lo importante es que estás aquí ahora, dispuesto a aprender y mejorar."
Reflexión:
Esta historia nos enseña el valor profundo de la sabiduría de nuestros mayores, especialmente de aquellos que nos aman y desean lo mejor para nosotros.
A menudo, en nuestra juventud y orgullo, desestimamos los consejos bien intencionados, convencidos de que podemos encontrar nuestro propio camino sin ayuda.
Sin embargo, la vida tiene una manera de mostrarnos la importancia de esos consejos a través de experiencias y fracasos. Reconocer nuestros errores y la sabiduría de quienes intentaron guiarnos es un acto de madurez y humildad.
Es crucial recordar que la verdadera sabiduría no se trata solo de conocimiento, sino de amor y experiencia compartida. Apreciemos a quienes nos ofrecen su guía, y aprendamos a escuchar con el corazón abierto, sabiendo que cada consejo dado con amor es un tesoro invaluable.
Aprendamos a valorar las lecciones de la vida y a aquellos que, con paciencia y amor, intentan enseñarnos el camino hacia una existencia más plena y significativa.
#Reflexiones
Desde joven, el hijo siempre había tenido una relación complicada con su padre. Este hombre sabio, con años de experiencia y vivencias, constantemente ofrecía consejos y advertencias a su hijo, con la esperanza de guiarlo hacia una vida plena y exitosa.
Sin embargo, el hijo, lleno de juventud y rebeldía, desoía estas palabras, convencido de que su camino era el correcto.
"Estudia con esmero", "Elige bien a tus amigos", "Ahorra para el futuro", "Sé paciente y perseverante", eran solo algunos de los consejos que el padre repetía con frecuencia. Pero el hijo, con una mezcla de impaciencia y orgullo, prefería hacer las cosas a su manera.
Con el tiempo, los fracasos comenzaron a acumularse. Las oportunidades se desvanecían, las amistades se disolvían, y los errores financieros se multiplicaban. Cada caída era más dura que la anterior, y con cada golpe, el hijo empezaba a cuestionar sus decisiones.
Años después, tras enfrentar numerosos desafíos y dificultades, el hijo se encontró solo en un momento de reflexión. Recordó las palabras de su padre, las lecciones ignoradas y los consejos desestimados.
Comprendió que su padre no hablaba desde el control o la imposición, sino desde el amor y el deseo de protegerlo y prepararlo para la vida.
En un acto de humildad, el hijo decidió buscar a su padre. Sentados juntos, bajo la sombra de un árbol que habían plantado juntos años atrás, el hijo finalmente expresó lo que había guardado en su corazón por tanto tiempo.
"Padre, ahora entiendo lo que intentabas enseñarme. Lamento no haberte escuchado antes. Tus palabras, aunque no lo veía entonces, eran guías que podrían haberme ahorrado mucho dolor.
Gracias por no rendirte conmigo y por siempre estar dispuesto a compartir tu sabiduría."
El padre, con una sonrisa llena de amor y comprensión, respondió: "Hijo, nunca es tarde para aprender y crecer. La vida es una serie de lecciones, y estoy orgulloso de que hayas encontrado tu camino. Lo importante es que estás aquí ahora, dispuesto a aprender y mejorar."
Reflexión:
Esta historia nos enseña el valor profundo de la sabiduría de nuestros mayores, especialmente de aquellos que nos aman y desean lo mejor para nosotros.
A menudo, en nuestra juventud y orgullo, desestimamos los consejos bien intencionados, convencidos de que podemos encontrar nuestro propio camino sin ayuda.
Sin embargo, la vida tiene una manera de mostrarnos la importancia de esos consejos a través de experiencias y fracasos. Reconocer nuestros errores y la sabiduría de quienes intentaron guiarnos es un acto de madurez y humildad.
Es crucial recordar que la verdadera sabiduría no se trata solo de conocimiento, sino de amor y experiencia compartida. Apreciemos a quienes nos ofrecen su guía, y aprendamos a escuchar con el corazón abierto, sabiendo que cada consejo dado con amor es un tesoro invaluable.
Aprendamos a valorar las lecciones de la vida y a aquellos que, con paciencia y amor, intentan enseñarnos el camino hacia una existencia más plena y significativa.
#Reflexiones
Vale la pena esperar
Génesis 12:1-5
Phil Stringer esperó 18 horas para abordar un vuelo demorado. Pero su paciencia y perseverancia valieron la pena. ¡No solo llegó a su destino a tiempo para unas reuniones de negocio importantes, sino que fue también el único pasajero en el vuelo! Los asistentes de vuelo le dieron todo lo que deseaba comer, y Stringer agrega: «Por supuesto, me senté en la primera fila. ¿Por qué no, si tienes todo el avión para ti solo?». Sin duda, la espera valió la pena.
Abraham también soportó lo que podría parecer una larga demora. Cuando se lo conocía como Abram, Dios le dijo que lo convertiría en «una nación grande» y que «[serían] benditas en [él] todas las familias de la tierra» (Génesis 12:2-3). El único problema para el hombre de 75 años (v. 4) era… ¿cómo se convertiría en una nación grande sin un heredero? Y aunque a veces no supo esperar lo suficiente (él y su esposa Sarai trataron de «ayudar» a Dios con algunas ideas equivocadas; ver 15:2-3; 16:1-2), «era […] de cien años cuando nació Isaac su hijo» (21:5). Más tarde, el escritor de Hebreos elogió su fe (11:8-12).
Esperar puede ser difícil. Y como Abraham, tal vez no lo hagamos a la perfección. Pero al orar y descansar en los planes de Dios, Él nos ayuda a perseverar porque siempre hace que la espera valga la pena.
#TomFelten
#NuestroPanDiario
Génesis 12:1-5
Phil Stringer esperó 18 horas para abordar un vuelo demorado. Pero su paciencia y perseverancia valieron la pena. ¡No solo llegó a su destino a tiempo para unas reuniones de negocio importantes, sino que fue también el único pasajero en el vuelo! Los asistentes de vuelo le dieron todo lo que deseaba comer, y Stringer agrega: «Por supuesto, me senté en la primera fila. ¿Por qué no, si tienes todo el avión para ti solo?». Sin duda, la espera valió la pena.
Abraham también soportó lo que podría parecer una larga demora. Cuando se lo conocía como Abram, Dios le dijo que lo convertiría en «una nación grande» y que «[serían] benditas en [él] todas las familias de la tierra» (Génesis 12:2-3). El único problema para el hombre de 75 años (v. 4) era… ¿cómo se convertiría en una nación grande sin un heredero? Y aunque a veces no supo esperar lo suficiente (él y su esposa Sarai trataron de «ayudar» a Dios con algunas ideas equivocadas; ver 15:2-3; 16:1-2), «era […] de cien años cuando nació Isaac su hijo» (21:5). Más tarde, el escritor de Hebreos elogió su fe (11:8-12).
Esperar puede ser difícil. Y como Abraham, tal vez no lo hagamos a la perfección. Pero al orar y descansar en los planes de Dios, Él nos ayuda a perseverar porque siempre hace que la espera valga la pena.
#TomFelten
#NuestroPanDiario
Cuando haya terminado la tempestad, fijate quién sigue a tu lado, quién preguntó cómo estabas o si necesitabas algo, revisa bien el teléfono para dejar claro quién llamó o escribió y quién no. Esos que dijeron que estarían contigo en las malas y lo cumplieron. Quédate con esas personas.
#DanielHabif
#DanielHabif
NO TE ADUEÑES DE UNA ENFERMEDAD
Mucha gente tiene el hábito de decir -soy diabético- o -soy hipertenso- y demás...
Cuando dices “ Yo soy " entonces eres dueño de la enfermedad, haces que la enfermedad sea una parte de ti mismo, se convierte en tu identidad.
Otro ejemplo clásico que la mayoría de la gente tiene, es la costumbre de decir :
“Estoy sufriendo de ..."
Esta es una declaración extremadamente dañina.
Estás asociando sufrimiento con tu enfermedad. Estás constantemente invitando a la miseria con el.
¿QUÉ DEBERÍAS DECIR?
Estoy atravesando la condición de diabetes o hipertensión.
Cuando dices, pasando por la condición, simplemente significa que estás en un viaje, que eventualmente llegará a un fin.
Al agregar la palabra condición estás diciendo que mejorarás.
¿POR QUÉ ES IMPORTANTE?
Las palabras tienen poder.
Las palabras llevan vibración.
Estas vibraciones están conectadas directamente con tu mente subconsciente.
Te conviertes en lo que dices.
La manifestación ocurre basada en lo que alimenta a tu mente subconsciente.
Cuando los pensamientos positivos, palabras positivas y acciones positivas, alimentan a la mente subconsciente, se manifiesta en situaciones positivas.
Estoy sanando,ya me sané, estoy trabajando en mi salud.
Está escrito:
Proverbios 6:2
"te has enlazado con las palabras de tu boca, has quedado atrapado en los dichos de tus labios"
Confiesa con tu boca sanidad 🌸🌻
#CaminarDiario
Mucha gente tiene el hábito de decir -soy diabético- o -soy hipertenso- y demás...
Cuando dices “ Yo soy " entonces eres dueño de la enfermedad, haces que la enfermedad sea una parte de ti mismo, se convierte en tu identidad.
Otro ejemplo clásico que la mayoría de la gente tiene, es la costumbre de decir :
“Estoy sufriendo de ..."
Esta es una declaración extremadamente dañina.
Estás asociando sufrimiento con tu enfermedad. Estás constantemente invitando a la miseria con el.
¿QUÉ DEBERÍAS DECIR?
Estoy atravesando la condición de diabetes o hipertensión.
Cuando dices, pasando por la condición, simplemente significa que estás en un viaje, que eventualmente llegará a un fin.
Al agregar la palabra condición estás diciendo que mejorarás.
¿POR QUÉ ES IMPORTANTE?
Las palabras tienen poder.
Las palabras llevan vibración.
Estas vibraciones están conectadas directamente con tu mente subconsciente.
Te conviertes en lo que dices.
La manifestación ocurre basada en lo que alimenta a tu mente subconsciente.
Cuando los pensamientos positivos, palabras positivas y acciones positivas, alimentan a la mente subconsciente, se manifiesta en situaciones positivas.
Estoy sanando,ya me sané, estoy trabajando en mi salud.
Está escrito:
Proverbios 6:2
"te has enlazado con las palabras de tu boca, has quedado atrapado en los dichos de tus labios"
Confiesa con tu boca sanidad 🌸🌻
#CaminarDiario
¿YA VISTE “FLECHAS ROTAS”?
“Una de las mayores trampas del enemigo, es robarnos el interés por sanar nuestra infancia; diciéndonos: “¡No hace falta revolver el pasado!, ¡ya el Señor hizo todas las cosas nuevas!”.
Esto mismo suele decir un predicador legalista que conozco, que vive condenando al resto del mundo, y de tanto en tanto, cuenta como su padre lo mataba a golpes cuando era solo un niño.
Aun cuando el Señor hace todas las cosas nuevas; ¡si él no permite que Dios sane sus heridas, seguirá lastimando a todos!
Insisto: un adulto herido, hiere. Un adulto sanado, sana.
Podemos construir todos los templos que queramos.
Pero si esas “flechas rotas” no encuentran amor dentro de esas paredes, solo seguirán siendo adultos heridos, fingiendo estar sanos. Esas “flechas rotas” que no se permiten sanar, esos niños maltratados dentro de cuerpos adultos, son el caldo de cultivo para el legalismo y la religión. Son adultos heridos que necesitan herir, ¡porque es el único lenguaje que conocen!”
Míralo completo en www.river-arena.org
#CaminarDiario
“Una de las mayores trampas del enemigo, es robarnos el interés por sanar nuestra infancia; diciéndonos: “¡No hace falta revolver el pasado!, ¡ya el Señor hizo todas las cosas nuevas!”.
Esto mismo suele decir un predicador legalista que conozco, que vive condenando al resto del mundo, y de tanto en tanto, cuenta como su padre lo mataba a golpes cuando era solo un niño.
Aun cuando el Señor hace todas las cosas nuevas; ¡si él no permite que Dios sane sus heridas, seguirá lastimando a todos!
Insisto: un adulto herido, hiere. Un adulto sanado, sana.
Podemos construir todos los templos que queramos.
Pero si esas “flechas rotas” no encuentran amor dentro de esas paredes, solo seguirán siendo adultos heridos, fingiendo estar sanos. Esas “flechas rotas” que no se permiten sanar, esos niños maltratados dentro de cuerpos adultos, son el caldo de cultivo para el legalismo y la religión. Son adultos heridos que necesitan herir, ¡porque es el único lenguaje que conocen!”
Míralo completo en www.river-arena.org
#CaminarDiario
“Las palabras están llenas de falsedad o de arte, pero la mirada es el verdadero lenguaje del corazón".
#William Shakespeare
#William Shakespeare
– Una mujer que se dedica a la crianza de los niños en el hogar, NO es una mujer vaga.
– Una esposa devota que por amor sirve a su esposo, NO es una mujer mantenida.
– Una mujer que decide VOLUNTARIAMENTE dedicar sus mejores años a la instrucción y formación de sus hijos, asegurándose que crezcan fuertes, inteligentes y honorables, en cuerpo y alma, NO es una mujer no realizada, todo lo contrario, es Maestra de maestrías.
– Una mujer que no trabaja fuera del hogar porque dedica todos sus días, y todas las horas del día, incluso mientras duerme en la noche, para asegurarse que su casa esté en orden, que sus hijos estén creciendo en personas honradas y que su marido esté satisfecho y toda la casa prospere en paz, NO ES una mujer inútil .
Proverbios 31:13-17
Ella recoge lana y lino, y trabaja feliz con sus manos. Es como un barco de un lugar lejano que de todas partes trae provisiones a la casa. Se levanta bien temprano en la mañana, da de comer a su familia y a las criadas. Va a ver un terreno, lo compra y usa el dinero que ha ganado para plantar un viñedo. Ella trabaja muy duro, fuertemente, y es capaz de hacer todo su trabajo.
Puede ser que este no sea el camino que elijas, joven mujer modernizada. Pero, por favor, NO desprecies cuando veas a una mujer valiente que elige este camino en tu generación, porque de todas las profesiones, esta es la de quien más dependemos TODOS.
#Reflexiones
– Una esposa devota que por amor sirve a su esposo, NO es una mujer mantenida.
– Una mujer que decide VOLUNTARIAMENTE dedicar sus mejores años a la instrucción y formación de sus hijos, asegurándose que crezcan fuertes, inteligentes y honorables, en cuerpo y alma, NO es una mujer no realizada, todo lo contrario, es Maestra de maestrías.
– Una mujer que no trabaja fuera del hogar porque dedica todos sus días, y todas las horas del día, incluso mientras duerme en la noche, para asegurarse que su casa esté en orden, que sus hijos estén creciendo en personas honradas y que su marido esté satisfecho y toda la casa prospere en paz, NO ES una mujer inútil .
Proverbios 31:13-17
Ella recoge lana y lino, y trabaja feliz con sus manos. Es como un barco de un lugar lejano que de todas partes trae provisiones a la casa. Se levanta bien temprano en la mañana, da de comer a su familia y a las criadas. Va a ver un terreno, lo compra y usa el dinero que ha ganado para plantar un viñedo. Ella trabaja muy duro, fuertemente, y es capaz de hacer todo su trabajo.
Puede ser que este no sea el camino que elijas, joven mujer modernizada. Pero, por favor, NO desprecies cuando veas a una mujer valiente que elige este camino en tu generación, porque de todas las profesiones, esta es la de quien más dependemos TODOS.
#Reflexiones